El jueves estuve ordenando la mesa de la oficina, quitando papelotes de en medio, rehaciendo la contabilidad por última vez... bajando al coche un montón de libracos, apuntes y similar que no son de la empresa, sino míos... la verdad es que aunque hace ya tres semanas que tomamos la decisión, me ha costado darles este adiós casi definitivo. No es definitivo porque aún quedan trámites notariales, el famoso reparto y demás...
Pero me he acostumbrado rápidamente. El viernes mismo me apunté al gimnasio (tenía que haberlo hecho hace unos meses pero lo he ido dejando) y ayer estuve mirando cosillas por internet para pasar unos días de relax por ahí en junio.
21 de mayo de 2006
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 comentarios:
¿no te da como un nosequé? ¿como una melancolia, mezclada con algo en el estómago?
En su día estuve ayudando en la tienda de una amiga para conseguir que el transito hacia el cierre fuese mas llevadero (no lo fué, pero estuvimos juntas mucho mas tiempo del que habriamos estado de otra manera); luego, cada una ha seguido su camino, pero tengo muy buenos recuerdos.-
realmente sí... no sé si exactamente melancolía... pero sí que le había cogido cariño a la ofi,al proyecto en sí... de hecho escribo esto desde allí, aunque como tal ya no tengo motivos para estar...
Pues nada, a redecorar tu vida y a quitarte el gusanillo con un nuevo proyecto.
¡Ánimo!
Isaac ¿le mandas a ikea?
como te pasas
;-P
Publicar un comentario